lunes, 23 de mayo de 2016


LOBO (THEEB)****

1916, desierto de Wadi Rum, Jordania. Mientras en Europa se suceden los combates de la Primera Guerra Mundial, y se desata la guerra en el Imperio Otomano, un oficial británico y un guía, Marjie, irrumpen en mitad del desierto de Arabia con el objetivo de llevar a cabo una extraña misión. Allí viven los descendientes de un gran jefe de tribu, muerto ya, donde Hussein inicia y educa a Theeb, su hermano casi adolescente, en una valerosa comunidad beduina, tradicional y aislada.



Hussein se ofrece por honrar la memoria de su padre a acompañar a los recién llegados por el terreno, a cuyas inclemencias habituales se añaden las amenazas de distintos asaltantes y grupos de revolucionarios y de mercenarios, colectivos que se han radicalizado desde que apareciera la amenaza del ferrocarril. Theeb, su hermano, les seguirá sin permiso, acompañando a los hombres en un peligroso viaje en busca de un misterioso pozo de agua en la antigua ruta de los peregrinos, y que cambiará su vida.



Pocos habrían reparado en una cinta jordana si la Academia de Hollywood no la hubiera situado entre sus predilecciones de cara al próximo Óscar a la mejor película de habla extranjera. Ocurre muy de vez en cuando, pero en ocasiones hay que dar las gracias por descubrirnos títulos y cinematografías casi desconocidas. Theeb, la última joya encontrada a tiempo, es una película de aventuras en el sentido más puro del término, un western árabe, sin diálogos de relleno, sin planificaciones escénicas espectaculares y sin subtramas que despistan. Basta el desierto y el alma para hacerla grande. Logra tenerte en vilo desde el principio hasta el fin.



Aquí sólo importa la lucha que se establece entre un niño y el desierto hostil con sus infinitos pobladores en el que intenta sobrevivir. El impacto se produce al ver cómo transcurre su curiosidad de niño hasta su iniciación adulta a través de las lecciones de la traición y lealtad, responsabilidad, madurez y pertenencia a una estirpe de hermandad y valor. La película sorprende por su impecable y exótica atmósfera (la orografía de sus escenarios convierte la historia en una peculiar histórica épica rocosa y desolada), y por su inteligente acercamiento a los instintos humanos. Theeb es la película que rodaría Kiarostami si se atreviera a pisar los dominios del thriller con sangre, sudor y arena. El director novel Naji Abu Nowar imparte una lección de cine por la síntesis, las elipsis y la descripción de personajes. El hombre, su capacidad de resistencia y su habilidad a la hora de hacer daño a propios y a ajenos, convertidos en el epicentro de una experiencia cinematográfica que se queda pegada a la piel.




Magnífica película, que ha ganado el Premio BAFTA 2016 al Mejor Debut de un Escritor, Director o Productor Británico (Naji Abu Nowar (Director y Guionista) y Rupert Lloyd (Productor), y en elFestival de Venecia 2014 el premio a Mejor Director (Seccion Orizzonti).

LOBO (THEEB)****
Título original: Theeb. Dirección: Naji Abu Nowar Guión: Naji Abu Nowar y Bassel Ghandour. Intérpretes: Lane Jacir Eid, Hassan Mutlag, Hussein Salameh, Marji Audeh, Jack Fox.  Productores: Bassel Ghandour y Rupert Lloyd. Fotografía: Wolfgang Thaler. Música: Jerry Lane. País: Jordania, Reino Unido, Emiratos Árabes, Qatar. Género: Aventuras. Thriller. Duración: 95 min. Año: 2014. Público: Todos.

miércoles, 11 de mayo de 2016

FULL OF GRACE


Director: Andrew Hyatt. Guión: Andrew Hyatt. Intérpretes: Noam Jenkins, Bahia Haifi, Kelsey Asbille, Merik Tadros, Taymour Ghaz, Eddie Kaulukuku. Producción: Justin Bell, Terence Berden, Jon Michael Kondrath. Diseño de producción: Christian Snell. Fotografía: Gerardo Madrazo. Montaje: John Lange. País: EE.UU. Año: 2015. Duración: 83 min. Público: Todos.


Una única voz femenina que canta casi con sollozo contenido un Kyrie y un Sanctus medieval, compuesto por una de las mujeres más interesantes del siglo XIII, Hildegarda Von Bingen.

Una mujer a la que se busca instintivamente para encontrarse consigo mismo y con Él. Un protagonismo claro y rotundo porque es la Madre. Tiene su misma sangre. La primitiva comunidad tiene Madre.
La vuelta a los orígenes, al momento más embrionario, donde se contiene todo y desde el que desarrolla todo sin contaminantes. La llamada.  

Esta película de autor, original e independiente, relata la intuición de María de que no le queda mucho tiempo. Retirada en un lugar tranquilo, a ella acude Pedro en búsqueda de respuestas. Han transcurrido varios años desde la resurrección de Jesús y sus seguidores están creciendo a un ritmo de tal calibre que los apóstoles necesitan de un guía. Pero Pedro, asustado, necesita parar, pensar y volver a comprender. Sólo María es capaz de darle la paz que necesita.

               Noam Jenkins y Bahia Haifi en Full of Grace

Un guión adaptación de las Escrituras (Hechos, Cartas de Pablo y Pedro), con producción sencilla pero de gran profundidad. Un zasca al racionalismo que lleva a "conocer" pero ser selectivo para no querer conocerle a Él. La descripción de la profunda paz a pesar de la constante del sufrimiento, de la cuesta arriba, "porque sólo así somos receptivos" de las cosas más profundas, casi parafraseando a C.S. Lewis.

La persistencia de la luz envolvente y desde dentro, que hace ver el mundo de otra manera. La belleza del mundo. La referencia a Terrence Malick. La belleza serena. La belleza real.

Algo que es fácil preguntarse es por qué no murió la madre antes del hijo: pudo ser de otra manera; pudo morir como el padre, antes. Pero no: a ella no se le ahorra nada, le toca todo. Y era la llena de gracia.


La historia se va tejiendo con sus últimos recuerdos, como un tapiz de nudos tupidos, de soles y sombras. Lo más humano y lo más divino. No es un una vida fácil para nadie pero menos si manejan entre sus manos una novedad verdaderamente alegre que cambia el mundo.

Esta película es grande en su extrema sobriedad. Hasta es sobria la muerte en parihuelas, los rostros serenos, la mirada sutil al cielo. No hay sentimentalismo en ningún pasaje, no hay ñoñería. La pura verdad. Merece la pena verla.


      El director y guionista Andrew Hyatt dirigiendo a Bahia Haifi

                              Cartel